Misteriosa encuesta que postula candidato sin respaldo en Salto

Está tan enrarecido el ambiente político que surgen encuestas en donde aparecen posibles diputados midiendo, que llevan a pensarlo, a razonarlo, a preguntarse.

Hay candidatos que evidentemente han presentado su intención de serlo, a la diputación, porque vienen trabajando por eso y tienen respaldo de sus sectores o partidos.

La firmeza se da claramente, según la última encuesta de FOCUS, del Lic. Erik Bremerman, en los partidos Blanco y Colorado.

Ahora bien, en el Frente Amplio aparecen algunas cuestiones dignas de preguntarse.

En entrevista realizada por Leonardo Silva en la tele y ante la pregunta puntual sobre Alvaro Lima y su 3% en dicha encuesta, la respuesta fue que cuando Andrés Lima se desvinculó de la Agrupación Armando Aguirre, lo hizo porque pretendía que su hermano fuera candidato a la diputación.

¿La verdad?. Impresentable respuesta.

De ser así, mi familia quiere que sea candidato y así lo propuso en reunión familiar.

Bremerman tendría que comenzar por explicar porque junto a otros politólogos pasan tanto tiempo en el despacho del intendente, para posteriormente darle seriedad a su trabajo porque al fin de cuentas para llegar a ser candidato a algo en una fuerza como la de izquierda, debe pasar por varios procesos.

A lo antes dicho se suma: ¿como es posible saber que piensa Alvaro cuando la columna la escribe Bochia en su nombre?.

Tengo años en esto de escribir y la verdad jamás vi que alguien escribiera a cuenta de otro y con nombre de otro.

Ser orgánicos, tener representación en las estruturas del Frente Amplio y lo que es principal, estar alineados a esa fuerza política a la que pretende representar.

No está bueno recibir para quienes sabemos como se juega el perverso juego de lo político, que por la mera intención de ser algo se es, o, lo que es peor, imaginar que ese 3% está siendo digitado para hacer jugar a alguien en un partido al que ni siquiera ha sido convocado.

Menos bueno está, ver cristalizado en encuestas lo que uno se supone se “arregla en escritorios”.

Si debemos asumir que en esas reuniones de politólogos, encuestadores y jerarcas de gobierno, la licenciatura parece ser moneda corriente y quizás, sea el entendido que como seres superiores a nosotros los comunes, pueden incidir en la opinión pública.

Bremerman llegó a participar de una reunión institucional de comunicaciones cuando yo integraba el equipo por lo que me permito preguntar: ¿de que hablamos?.

Es muy poco serio caer en viejas costumbres de pretender manejar la opinión pública con encuestas o niveles de aceptación. Son costumbres que pertenecen a otras formas de hacer y accionar políticamente que no pertenecen a la izquierda.

Daniel Caiazzo