La leishmaniasis (o leishmaniosis) es un conjunto de enfermedades zoonóticas y antroponóticas causadas porprotozoos del género Leishmania. Las manifestaciones clínicas de la enfermedad van desde úlceras cutáneas que cicatrizan espontáneamente, hasta formas fatales en las cuales se presenta inflamación grave del hígado y delbazo. La enfermedad es una zoonosis que afecta tanto a perros como a humanos. Sin embargo, animales silvestres como liebres, zarigüeyas, coatíes y jurumíes, entre otros, son portadores asintomáticos del parásito, por lo que se los considera animales reservorios.
El agente se transmite al humano y a otros animales a través de la picadura de hembras de los flebotomos, un grupo de insectos chupadores de sangre pertenecientes a los géneros Phlebotomus del Viejo Mundo, (Europa,África y Asia) y Lutzomyia en América, de la familia Psychodidae.1 En Colombia, en ciertas regiones, este tipo de insectos es más conocido como palomilla. En las zonas tropicales de Ecuador se lo conoce como «arenillas».
Esa es la explicación resumida de una enfermedad que nos tiene a mal traer y que ha generado por parte del gobierno nacional la aplicación de a medida de 180 días de emergencia sanitaria para el departamento.
Paralelamente el legislativo comunal procedió levantar su receso para realizar una extraordinaria y recibir autoridades de la salud departamental que de alguna manera están involucrados en dar respuesta a esta situación.
La exposición de los profesionales se basó fundamentalmente en explicar y fundamentar el porque de la eutanasia de canes infectados, que es lo que todos los organismos internacionales proponen ante estos casos y la responsabilidad en cuanto a la tenencia responsable de animales y la responsabilidad de mantener los hogares, las cuadras, los barrios, lo más limpio posibles para evitar la propagación de la enfermedad.
No es un momento fácil. Se ha sabido de situaciones que a pesar de la emergencia se han constatado en Salto como aquellos que con perros infestados se han trasladado a otros departamentos con esas mascotas, o bien quienes preocupados por la situación trasladan sus mascotas a establecimientos del interior del departamento con la enfermedad contraída lo que significa una preocupación de expansión aún mayor.
Los ediles mucho consultaron, mucho preguntaron, y en algún momento de la sesión la leishmaniasis visceral pasó a rozar lo político en la búsqueda de responsables aunque una y otra vez los profesionales defendieron el accionar desde el comienzo cuando se detectó el primer caso.
Finalmente la Junta Departamental de Salto resolvió:
El cumplimiento de las autoridades departamentales en cuanto a la recolección de basura y podas en tiempo y forma.
Aplicar a los ciudadanos la ley vigente en cuanto a tenencia responsable de animales.
Solicitar al Ministerio de Salud Pública una campaña masiva a la población de las medidas que se adoptan.
Mantener una vigilancia epidemiológica activa.
