Lamentablemente, la vorĆ”gine de la información, o la ausencia, nos lleva a olvidarnos de historias de vida que conviven con nosotros permanentemente. En el dĆa a dĆa. En el hora a hora.
Hace unos veinte dĆas, contĆ”bamos desde este portal, la historia generada por un hombre de 51 aƱos de edad, que al volver a su casa y por razones que sabrĆ”n las puertas adentro, debió dormir en una zorra que le pidió prestado a un vecino en Barrio Progreso.
TrÔgico por donde se lo mire, acostado, dormido, con un cigarrillo encendido, pensando seguramente que iba a hacer de su vida. Y ese cigarro, lejos de ser el compañero de todo momento, pasó a ser su condena.
La sigue peleando, con un 80% de quemaduras en su cuerpo, generƔndose, por los datos que obran en poder de este portal, en una lucha diaria, minuto a minuto.
Como que la tragedia para los medios tiene que ver con el primer impacto, olvidÔndonos, de las consecuencias, del seguimiento. Del entender que nadie en este mundo debe o puede pasar como un verdadero anónimo.
MƔs historias
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Alerta Amarilla vigente, se actualiza 8y30 am
#ElEquipoQueNosUnešŗš¾